El molino centenario sigue desempeñando un papel fundamental en el drenaje del pólder de Wogmeer, pero necesita una renovación profunda. También es necesario sustituir el mortero del Nieuw Leven de 1608, una operación que cuesta aproximadamente 300.000 euros.
Los molineros y la fundación De Westfriese Molens intentan recaudar este dinero mediante diversas subvenciones y campañas. Por lo tanto, el premio Mill, dotado con 75.000 euros, habría sido una aportación bienvenida.