La pelota empezó a rodar cuando una víctima de Ostende denunció una estafa de este tipo a través de WhatsApp. Gracias a una investigación exhaustiva se identificaron doce víctimas, pero según la fiscalía en realidad eran muchas más.
Desde octubre de 2022 hasta septiembre de 2023, la banda envió periódicamente los llamados mensajes bomba. Hasta 6.000 personas recibieron un mensaje falso de un familiar al mismo tiempo. «Mamá, mi teléfono móvil está bloqueado y necesito pagar una factura urgentemente. ¿Puedes ayudarme, sino tengo problemas?», por ejemplo.