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Las triatletas femeninas se lanzaron desde un pontón azul al río Sena el miércoles por la mañana después de que el agua finalmente fuera considerada segura para la competencia, luego de días de demoras y feroces críticas a los organizadores de los Juegos Olímpicos de París.
“Los resultados de los últimos análisis de agua, recibidos a las 3.20 am, han sido evaluados como conformes por World Triathlon, lo que permite que se celebren las competiciones de triatlón”, dijeron los organizadores y World Triathlon.
El anuncio se produjo después de que se cancelaran dos sesiones de práctica y el triatlón masculino se pospusiera 24 horas hasta el miércoles debido a altos niveles de E. coli y otras bacterias en el agua.
El gobierno francés había insistido en celebrar la etapa de natación de las carreras de triatlón en el Sena, en un esfuerzo por revivir el baño en el río parisino después de una prohibición de un siglo. Las autoridades gastaron 1.400 millones de euros en un proyecto de infraestructura que duró varios años para que el Sena estuviera lo suficientemente limpio para la competición, pero el plan sigue dependiendo completamente del clima.
Cuando llueve mucho, como ocurrió el viernes y el sábado, las antiguas alcantarillas de la ciudad se desbordan hacia el río para evitar que las calles se inunden con aguas residuales. París ha intentado mitigar ese riesgo construyendo un enorme tanque de almacenamiento subterráneo que podría captar hasta 46.000 metros cúbicos de aguas residuales para evitar que fueran a parar al río después de las tormentas.
Sin embargo, el sistema se vio desbordado por el mal tiempo la semana pasada, poniendo en peligro las promesas repetidas por los organizadores de que el río estaría listo para el triatlón y la natación del maratón. Durante varios días, las pruebas mostraron que los niveles de E. coli y otras bacterias eran superiores al límite de 900 unidades formadoras de colonias establecido por World Triathlon como seguro para las competiciones.
El presidente Emmanuel Macron celebró el esperado momento recordando el compromiso financiero del Estado. “¡Ya estamos! El Sena es un lugar apto para el baño”, afirmó el miércoles en las redes sociales.
Se suponía que el triatlón sería uno de los puntos culminantes de los Juegos Olímpicos de París, dado que el recorrido se desarrollaba con el espectacular telón de fondo del Sena y monumentos conocidos: la natación comenzaba en el puente Alexandre III, seguida del ciclismo y la carrera a lo largo de los Campos Elíseos y pasando por el Museo de Orsay.
En cambio, comenzó un foco de críticas por el hecho de que los organizadores habían puesto su deseo de lograr escenarios de eventos perfectos para una postal por delante de las necesidades de los atletas que entrenan durante años para poder competir en los Juegos Olímpicos.
No había un sitio alternativo para realizar el triatlón en caso de que el río estuviera demasiado sucio para nadar, aunque se había establecido uno para la natación de maratón y el otro evento se realizaría en el Sena.
Con más tormentas de verano pronosticadas para los próximos días, aún no está claro si el relevo mixto de triatlón y la natación de maratón podrán realizarse la próxima semana.
El miércoles, decenas de miles de aficionados se congregaron a lo largo del Sena y de los Campos Elíseos para animar a los triatletas.
La atleta francesa Cassandre Beaugrand cruzó la meta en primer lugar y ganó la primera medalla de oro de su país en esta prueba. La suiza Julie Derron ganó la plata y la británica Beth Potter ganó el bronce.