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El presidente de la UBS, Colm Kelleher, dijo que le gustaría preparar una lista corta de tres posibles sucesores del director ejecutivo Sergio Ermotti dentro de los próximos “dos años”, con el objetivo de emular el proceso de sucesión fluido de su antiguo empleador Morgan Stanley.
Hablando en el Financial Times Cumbre Bancaria Mundial El martes, Kelleher dijo que se considerarían contrataciones externas para reforzar la competencia por uno de los roles más importantes en la banca global.
“Morgan Stanley fue un golpe incruento; me encantaría llegar al escenario en el futuro en el que la UBS pudiera aplicar el mismo manual. . . con varios candidatos creíbles”, afirmó. Morgan Stanley a principios de este año tenía al menos tres contendientes internos para suceder al director ejecutivo saliente, James Gorman, antes de elegir al director de banca de inversión, Ted Pick.
Ermotti regresó a la UBS esta primavera, pocos días después de que el banco aceptara rescatar a su antiguo rival Credit Suisse.
Kelleher dijo que había estado de acuerdo con Ermotti cuando se reunió en que ambos deberían preparar una lista corta de posibles sucesores mientras Ermotti se concentraba en integrar el negocio de Credit Suisse.
“Lo discutí en la cena con Sergio cuando aceptó volver”, dijo Kelleher. “Hay mucha vida en él, pero no es tan joven como algunas personas”.
Dijo que UBS estaba avanzando hacia un período más complicado en su integración de Credit Suisse, haciéndose eco de los comentarios hechos por Ermotti de que 2024 sería un año crucial y advirtiendo sobre los elevados costos que se avecinan.
“Las pérdidas fáciles son deshacerse de la plantilla, las más difíciles se asignan a funciones de control, datos y TI”, añadió Kelleher. “2024 es el primer año en el que no tenemos cobertura para los costes ‘fáciles'”.
El elemento más controvertido de la adquisición de Credit Suisse fue que incluyó la eliminación de tenedores de bonos que poseían 17.000 millones de dólares en títulos de nivel uno adicionales. La decisión ha dado lugar a hasta 9.000 millones de dólares en demandas legales, pero Kelleher dijo que era una decisión con la que UBS no tenía nada que ver.
“Soy comprensivo con los tenedores de bonos, pero leer su prospecto contiene una lección”, añadió.
UBS regresó recientemente al mercado AT1, emitiendo 3.500 millones de dólares en bonos que recibieron 36.000 millones de dólares en intereses de los inversores. Kelleher dijo que espera más emisiones de AT1 por parte de UBS en un futuro próximo, y los analistas estiman que el banco necesitaría emitir otros 11.000 millones de dólares de dicha deuda para que su capital sea eficiente.
“El hecho de que tuviéramos 36.000 millones de dólares de intereses en 3.500 millones de dólares en bonos nos dice que es una batalla de ayer”.