Por Pía Fredebeul
Cada día mueren en el mundo 150 especies de animales y plantas. También en Berlín están amenazadas más de 700 especies de plantas silvestres. Un proyecto piloto en Pfaueninsel pretende contrarrestar esta muerte en la capital.
La destrucción de la naturaleza y las consecuencias del cambio climático no se limitan a la flora y la fauna de Berlín. ¡Pero ahora tres instituciones importantes están contraatacando!
Su plan: un proyecto piloto en Pfaueninsel, en Zehlendorf, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Ayer los equipos de jardinería de la Fundación Palacios y Jardines Prusianos (SPSG) de Berlín-Brandeburgo, junto con empleados del Jardín Botánico, trajeron aquí al suelo unas 150 plantas en peligro de extinción.
En el páramo detrás de la rosaleda se plantaron 50 ejemplares de dos especies raras de retama: la retama alemana y la retama peluda. La Fundación para la Conservación de la Naturaleza de Berlín (SNB) también apoya el proyecto.
El segundo evento de siembra se llevó a cabo en la lechería. Allí se plantaron en el suelo 100 sarna perfumada. Ahora las plantas deberían recuperarse de su baja población y volver a florecer.
Y esto es sólo el comienzo: dependiendo del éxito del proyecto piloto, seguirán otras especies de plantas en peligro de extinción.