Arabia Saudita será la sede de la Copa Mundial de fútbol masculino de 2034 después de que Australia, el único otro contendiente, optara por no presentar una candidatura rival.
La FIFA, el organismo rector del fútbol mundial, dijo que la “declaración de interés” de Arabia Saudita fue la única presentada el martes, una fecha límite para los posibles postores que se fijó recién este mes.
Football Australia había dicho anteriormente que había “explorado la oportunidad” de tratar de albergar el evento de 2034, pero que había “llegado a la conclusión de no hacerlo”. Esto despejó el camino para que Arabia Saudita se asegurara los derechos de sede para 2034 sin oposición.
El proceso para elegir un anfitrión para el mayor torneo de fútbol masculino fue abruptamente remodelado por la FIFA este mes cuando el organismo rector global del juego anunció que el torneo 2030 había sido adjudicado a una candidatura conjunta de España, Portugal y Marruecos. En la práctica, esto impidió que todas las naciones europeas y africanas presentaran ofertas para 2034.
En una medida muy inusual, la FIFA anunció entonces que se celebrarían tres partidos en Sudamérica para conmemorar el centenario de la primera Copa del Mundo, que se celebró en Uruguay. Dado que Estados Unidos, Canadá y México fueron anfitriones del torneo de 2026, sólo los países de Asia y Oceanía pudieron presentar ofertas para 2034.
Fundamentalmente, la FIFA también redujo drásticamente todo el proceso de licitación para 2034, dando a los posibles anfitriones sólo tres semanas para presentar sus expresiones de interés. Arabia Saudita confirmó su intención de presentar una oferta a los pocos minutos del anuncio.
“Creemos que es el momento adecuado para que Arabia Saudita sea sede de la Copa Mundial de la FIFA”, dijo Yasser Al Misehal, presidente de la Federación de Fútbol de Arabia Saudita, en un comunicado poco después de que se anunciaran los anfitriones de 2030.
La Confederación Asiática de Fútbol, que cuenta entre sus miembros tanto con Arabia Saudita como con Australia, dijo poco después que apoyaba la candidatura de Riad.
La propuesta del reino del Golfo rápidamente obtuvo un apoyo más amplio, fruto de la breve pero intensa campaña del reino para construir vínculos en el deporte más visto del mundo. La federación saudita de fútbol ha firmado docenas de acuerdos de cooperación con sus homólogos en todos los rincones del mundo durante el año pasado, mientras que los patrocinadores del reino han estado buscando activamente acuerdos tanto con clubes como con organizadores de torneos de fútbol.
La oferta sin oposición de Arabia Saudita acelerará su avance en el fútbol, que es parte de su expansión más amplia en el deporte mundial. Los clubes sauditas gastaron más de 800 millones de euros en transferencias durante la ventana de transferencias de verano para traer jugadores de renombre a su liga nacional. El verdadero nivel de gasto probablemente fue mucho mayor debido a los extraordinarios paquetes salariales que se ofrecen a estrellas como el ex ganador del Balón de Oro Karim Benzema y el delantero brasileño Neymar.
Una Copa Mundial en Arabia Saudita, que ya ha generado duras críticas por parte de defensores de los derechos humanos y grupos de fanáticos, reavivará el feroz debate sobre los derechos humanos que dominó el período previo a la última edición del torneo, que se celebró a fines del año pasado en Qatar.
Australia dijo que, en cambio, se centraría en las candidaturas para albergar la Copa Asiática femenina en 2026 y la Copa Mundial de Clubes, un nuevo torneo que enfrentará a clubes de todo el mundo entre sí, en 2029.