En el acalorado debate sobre las consecuencias del cambio climático para el esquí, la ex estrella alpina Felix Neureuther ha vuelto a proponer soluciones concretas.
Además de un inicio de temporada más tardío, el Alpine alemán más exitoso en la historia de la Copa del Mundo impuso una prohibición de entrenar desde el 1 de mayo al 31 de agosto, “similar a la prohibición de realizar pruebas en la Fórmula 1”.
“Un comienzo de la Copa del Mundo de esquí a mediados o finales de noviembre es suficiente”, escribió Neureuther en Instagram. La sede de Sölden podría mantenerse, pero Neureuther ampliaría el programa con un slalom gigante para mujeres y hombres con un slalom.
Las ventajas desde su punto de vista: “El interés de la población sería mucho mayor, porque poco a poco la gente espera con ansias la llegada del invierno”. Y: “No sería necesario volar a Finlandia a mediados de noviembre para disputar un Mundial ante un máximo de 1.000 espectadores”.
La ex estrella del esquí Neureuther contra el entrenamiento de verano en los glaciares
El primer slalom de la temporada se disputa tradicionalmente en Levi, al norte del Círculo Polar Ártico; allí Neureuther ganó la última Copa del Mundo en 2017. Además, una salida más tardía aliviaría “una presión increíble” a los atletas, las empresas de esquí y las asociaciones, afirmó el hombre de 39 años.
La prohibición del entrenamiento con polea daría a los atletas más tiempo de recuperación y evitaría que los niños de diez años entrenen en los glaciares en verano, como ocurre actualmente. “¡Esta tendencia no es buena!”, escribió Neureuther. “¡Esta profesionalización temprana del deporte está ahuyentando a un número increíble de niños!”
La razón más importante para una prohibición sería “que se ahorraría mucho CO2 porque limitaría severamente el esfuerzo y los viajes”.
Con sus ideas quiere garantizar que “la gente pueda seguir esquiando con la conciencia tranquila” y que el deporte “no se vuelva aún más elitista”.