Reserva para el Chelsea y protagonista con Marruecos en el Mundial: el centrocampista ofensivo de los Blues puede llegar en enero
El Bélgica-Marruecos no solo fue un gran partido mundialista sino también una oportunidad para reflexionar sobre el mercado rossoneri: Hakim Ziyech fue el protagonista de la tarde con un lanzamiento de falta que derivó en su primer gol (anulado) y luego con la asistencia de duplicación. Ziyech, nacido en los Países Bajos de padres marroquíes, jugó un papel decisivo en las jugadas a balón parado (especialidad en la que el Milán aceptaría con gusto refuerzos) y al final puso su creatividad al servicio del equipo: al Milán le vendría bien un comodín de ataque, un poco Un outsider un tanto mediapunta, capaz de solucionar hasta las prácticas más espinosas. En la parte final de la carrera en Bélgica entró Charles De Ketelaere: un cuarto de hora sin números particulares y sin poder puntuar. Un resumen de estos primeros meses para los rossoneri. Todavía impalpable pero reconfortado por Pioli y la directiva: saldrá el gran talento. Lo mismo debe pensar el técnico Martínez por haberlo embarcado en el grupo mundial. Mientras tanto, sin embargo, es Ziyech quien dirige el destino del grupo y el mercado de Milán también podría sacar nuevos indicios de ello: esperando a De Ketelaere, el Club nunca ha jodido una inversión en jugadores jóvenes, podría haber espacio para Hakim, que cumplió veintinueve años en marzo. La edad adecuada para querer vivir una segunda juventud deportiva: en el Chelsea envejece en el banquillo, cinco partidos en esta Premier League (solo uno como titular), 54 minutos repartidos en tres participaciones como suplente en Champions.
Rescate
—
En Milán podría volver a brillar, siguiendo el ejemplo de Tomori y Giroud, gris en Londres y radiante de nuevo en Milán. Con todo, devolverle la sonrisa a Ziyech y sobre todo un protagonismo técnico tiene unos costes asequibles: el Chelsea ha perdido la esperanza de recuperar gran parte de los 40 millones invertidos en enero de hace dos años para comprárselo al Ajax. Los banquillos que se vio obligado a tener redujeron a más de la mitad el precio: y una solución aún más conveniente para el Milan sería la cesión onerosa en enero con derecho a recompra en verano. Un trato total por valor de poco más de quince millones. El fichaje por poco menos de la mitad, seis, es el auténtico escollo. Aunque no habría comisiones que pagar a los agentes: el representante de Ziyech es el propio Ziyech. Y para volver a ser protagonista en un gran club, un técnico con visión de futuro aconsejaría a su cliente sacrificar su sueldo.
28 de noviembre – 10:35
© REPRODUCCIÓN RESERVADA