Y entonces puede que en su casa haya un ‘verdadero Van Gogh’ colgado: «Nuestra hija quiere comprarse un caballo o un Porsche con el dinero».

Como máximo una vez cada diez años se reconoce un verdadero Van Gogh en algún lugar del mundo. Las posibilidades de que Lore y Hannes, residentes en Gante, pertenezcan a ese círculo selecto son pequeñas. Y, sin embargo, a la pareja de Rabotwijk le gusta creer que en su casa adosada cuelga un auténtico autorretrato del maestro holandés. «Pronto habrá claridad», afirma Hannes.


Cedric Matthys


Última actualización:
20:40











ttn-es-34