A primera vista, el 3D no es una disciplina al alcance de todos. Necesitas un software potente, una buena tarjeta gráfica y muchos conocimientos. Por eso, algunos profesionales no se atreven a aventurarse allí. Afortunadamente, empiezan a surgir en el mercado herramientas que permiten a todo el mundo probar suerte con el 3D, como Spline o Womp. El objetivo de este último es permitir que los principiantes en 3D puedan crear proyectos cualitativos y limpios.
Una herramienta accesible para principiantes.
En Womp, todo se ha simplificado, incluida la interfaz. Se muestran la mayoría de funcionalidades, como los diferentes objetos de la escena, las formas, los materiales… Durante todo el proceso, Womp explica el significado de cada elemento para que no te sientas perdido.
Existen, por supuesto, otras opciones imprescindibles para el 3D, como la rotación de objetos, el brillo, la importación de una imagen de referencia y muchas otras. En definitiva, encontramos las funcionalidades básicas, pero imprescindibles, que se pueden utilizar en un software 3D avanzado.
Todas las creaciones están disponibles en la pestaña “Mis proyectos”. Luego se pueden descargar y compartir.
Por si tenemos alguna duda o dificultad para llevar a cabo nuestro proyecto, Womp dispone de un apartado de “Comunidad”. Los usuarios de la herramienta se ayudan entre sí y comparten tutoriales para poder ayudar a los demás. Funciona con un sistema de canales creados por tema de debate: tipografía, puesta en común de creaciones, inspiración… También hay canales para realizar retos y conocer a otros creativos. Los eventos en línea también se organizan según las necesidades.
También puedes consultar el trabajo de otros usuarios en la pestaña “Descubrir”. De la misma forma que en las redes sociales, te permite descubrir proyectos realizados con Womp. Puedes comentar y dar me gusta a las publicaciones.
Todo se hace desde el navegador, por lo que no hay software que instalar. La ventaja es que la herramienta es completamente gratuita.