Vitaminas y minerales, para un verano sin cansancio
Para lidiar mejor con los efectos secundarios del verano combinados con los de la menopausia, existen estrategias. Pero para que funcionen es necesario seguir las precauciones con constancia y motivación. PAGS.permanecer particular la atención a una nutrición adecuada es el primer paso.
El estilo de alimentación del verano.
Un estilo de comida que consiste principalmente en verduras crudas y cocidas, legumbres, cereales y pescado o carne blanca es esencial para suministrar al cuerpo todos los nutrientes que lo ayudan hidrata y nutre sin apelmazar. Además, siempre se dice pero (casi) nunca se hace, hay que beber al menos 2 litros de agua al díamejor no espumoso para limitar la hinchazón abdominal y evitar efectos desagradables como el meteorismo
Vitaminas y minerales en verano: ¿cuáles son necesarios?
En caso de una dieta poco rica en frutas, verduras y proteínas nobles, o si sus análisis de sangre revelan uno deficiencia de vitaminas y oligoelementos, Es útil incorporar vitaminas y minerales específicos en su rutina diaria.
Vitaminas B2, B6 y B12 para recuperar energía
“El envejecimiento puede conducir, sobre todo en las mujeres, a una disminución de la tasa metabólica basal, lo que favorece el aumento de la masa grasa en detrimento de la masa magra”, explican los expertos del Consejo Médico de Meritene, la marca de Nestlé Health Science que se ocupa de la nutrición completa para el bienestar de los adultos. «Uno de los primeros y más comunes síntomas es sólo uno fuerte y general sensación de cansancio. Una ayuda importante, por lo tanto, puede provenir de la integración en la dieta de los micronutrientes correctos, como vitaminas B2 y B6indispensable para el metabolismo de los hidratos de carbono, proteínas y grasas, y vitamina B12, que favorece la asimilación de los ácidos grasos“.
Magnesio, calcio y fósforo para la salud ósea, junto con vitamina D.
A partir de los 50 años, cuando se inicia en la mujer un proceso de deterioro de la microarquitectura del tejido óseo que conduce a un aumento de la fragilidad, es necesario mantener los huesos protegidos y sanos. «Para ralentizar este proceso es importante integrar el aporte de minerales como el calcio, el magnesio y el fósforo que contribuyen al mantenimiento de la densidad ósea. Para facilitar la absorción entonces viene en ayuda Vitamina Dno solo a través de la integración en la dieta sino también a través de una exposición adecuada a la luz solar», recomienda el Profesor Gian Marco Giorgetti.