Desde BZ/dpa
Rey Carlos III y heredero al trono, el príncipe William, realizó una visita sorpresa a la fila de un kilómetro de largo para acceder al trono de la reina Isabel II en Londres. Padre e hijo aparecieron cerca del Palacio de Lambeth en la orilla sur del río Támesis el sábado a la hora del almuerzo.
Hablaron con quienes esperaban hasta 24 horas para hacerle una última visita a la Reina y despedirse. La multitud saludó a los dos miembros de la realeza con aplausos, vítores y gritos de «Dios salve al rey».
«Espero que no tengas demasiado frío», le dijo el nuevo rey a una mujer que esperaba en la fila, según la BBC. Las temperaturas habían llegado a un solo dígito en Londres durante la noche. Un guardia de seguridad advirtió a los que esperaban que «guardaran sus teléfonos, se dieran la mano y disfrutaran el momento».