Víctimas de trata de personas también explotadas por sus propios padres: ‘Se necesita acción’

Debido al ‘traqueteo’ de la silla de ruedas, Wil ya casi no se atreve a salir de casa: ‘Ya golpeé a un niño’

Un desastre. Así llama Wil van Herp (73) a su silla de ruedas. La cosa tiene peculiaridades y por eso no se siente segura para salir. “Suena por todos lados. El reposapiés está flojo. Se desvía a la izquierda y a la derecha. Al salir del supermercado, me tropecé con las puertas. ¡Tenía ese poste del Jumbo entre mis piernas!”.

16 de octubre



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