Recursos y alianzas internacionales. Simplificaciones y lucha contra la competencia desleal, también a través de deberes medioambientales para proteger a las empresas nacionales y europeas. La estrategia de protección del Made in Italy se mueve en varios niveles. Por último, un decreto del ministro Adolfo Urso ha destinado más de 1.100 millones a financiar contratos de desarrollo que apoyen programas de inversión de gran envergadura.
Una licitación de 390 millones para apoyar cadenas de suministro estratégicas
En concreto, una nueva licitación por valor de 390 millones de euros se destina a apoyar cadenas de suministro estratégicas. Los recursos se dirigen a los sectores aeroespacial y aeronáutico, diseño, moda y mobiliario, metal y electromecánico, químico-farmacéutico, caucho y plástico y alimentación para la creación o fortalecimiento de las cadenas de suministro de referencia.
Llega la ley marco del made in Italy
Mientras tanto, está en trámite la ley marco del Made in Italy, que podría ser discutida en unas horas en el próximo consejo de ministros. Este proyecto de ley prevé un conjunto de medidas estudiadas por varios dicasterios, comenzando con un fondo soberano de riqueza para proteger las cadenas de suministro estratégicas y la escuela secundaria made in Italy. Los artículos del proyecto de ley, casi 50 según un borrador difundido en las últimas semanas, prevén, entre otras cosas, normas para el desarrollo de las competencias necesarias para el sistema productivo, tutorizar a los jubilados para el relevo generacional en el ámbito laboral y penas más severas contra la falsificación. y competencia desleal.
Urso: deberes ambientales necesarios
Otra forma de competencia desleal en la mira del ministro es la de empresas extranjeras que no tienen estándares ambientales y sociales similares a los italianos. “Tenemos que proteger a las empresas y ciudadanos europeos. Se puede, se debe hacer también con las normas relativas a la importación o exportación de productos, esos que con razón se llaman deberes ambientales”, dijo Urso, en una conferencia sobre el mercado energético.
El papel del impuesto al carbono
En este frente, el Parlamento Europeo aprobó en abril el establecimiento del impuesto al carbono en las fronteras, que funciona efectivamente como una tarifa ambiental en sectores intensivos en energía y con mayor riesgo de deslocalización. El impuesto al carbono es uno de los pilares del paquete Fit for 55, que ahora debe ser ratificado por los estados miembros.