United Airlines ha encontrado pernos sueltos y otros «problemas de instalación» en algunos de los aviones Boeing 737 MAX-9 que fueron inspeccionados después de que un avión de Alaska Airlines perdiera parte de su fuselaje durante un vuelo el pasado viernes. Así lo informó la agencia de noticias AP el martes. Nadie resultó herido en el incidente que involucró al avión de Alaska Airlines.
«Desde que comenzamos las inspecciones preliminares el sábado, hemos encontrado casos que parecen estar relacionados con problemas de instalación en el tapón de la puerta, por ejemplo, pernos que requirieron un ajuste adicional», dijo la aerolínea.
Los tornillos sueltos se encontraron en el panel utilizado para sellar un área reservada para salidas de emergencia adicionales. En el vuelo de Alaska Airlines del viernes, ese panel se soltó aproximadamente media hora después del despegue mientras volaba sobre Oregón a unos 15.000 pies.
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Problemas de seguridad
Después del incidente, la autoridad de aviación estadounidense FAA anunció que todos los aviones Boeing 737 MAX-9 que se encontraban en Estados Unidos o eran propiedad de una aerolínea estadounidense debían ser inspeccionados. Las aerolíneas europeas podrían seguir volando.
No es la primera vez que el Boeing 737 MAX sufre problemas de seguridad. En 2018 y 2019, se produjeron accidentes con aviones en Indonesia y Etiopía. Estos costaron la vida de 346 personas. Posteriormente, los aviones quedaron en tierra durante veinte meses.