El lunes por la tarde, una familia temió brevemente que no se llevara a cabo una excursión al Efteling. Su coche se averió de camino a Kaatsheuvel. Los oficiales vinieron a ayudar. «Eso hizo muy felices a las señoritas», escribió la policía en las redes sociales.
El padre, la madre y sus dos hijas se dirigían a Efteling cuando un problema con el coche arruinó la diversión. La esperanza estaba puesta en la ANWB. Pero lamentablemente para la familia, determinaron que el auto ya no podía continuar.
Tuvieron que remolcar el coche y por un momento la excursión pareció llegar a su fin.
«De esta manera todavía podríamos poner una sonrisa en sus caras».
Hasta que los agentes del equipo básico de Leijdal pusieron a disposición su coche de policía como taxi. Llevaron a la madre y a las dos hijas a un coche, con el que pudieron continuar su camino. «Esto hizo muy felices a las señoritas. Así, a pesar de la doble mala suerte, pudimos sacarles una sonrisa», escribieron los agentes en las redes sociales.