Sin embargo, al menos una vez por semana hay reuniones entre los encargados de la fábrica y los expertos de la FASFC para elaborar un plan para el reinicio de actividades, informa la portavoz de la FASFC, Aline Van den Broeck. “En cuanto Ferrero presente una solicitud de admisión, la FASFC tiene un plazo legal de treinta días para pronunciarse”, dijo la vocera. «No es nuestra intención dejar que las cosas se prolonguen innecesariamente, pero nos aseguraremos de que se respeten las condiciones».
Ferrero, por su parte, había dicho este martes que la empresa está trabajando en «un plan concreto y acelerado para solucionar el problema de la contaminación por salmonela en Arlon».
La fábrica de Ferrero en Arlon se inauguró en 1989 y emplea a 725 personas. La fuerza laboral puede crecer a 1.100 en períodos pico.