Los miembros del grupo del crimen organizado se hicieron pasar por policías y expertos en seguridad bancaria. Estafaron a los finlandeses con más de 300.000 euros.
Inka Soveri
Las autoridades están investigando un gran complejo criminal en el que miembros de un grupo del crimen organizado realizaron varias llamadas fraudulentas. Se hicieron pasar por agentes de policía y expertos en seguridad bancaria.
Las llamadas se realizaron desde departamentos ubicados en la región capital. Los sospechosos son tanto ciudadanos finlandeses como extranjeros.
Según la policía, los sospechosos engañaron a varias personas para que transfirieran dinero a cuentas que administraban. El grupo fue defraudado por unos 360.000 euros por parte de los finlandeses. De esta cantidad, la policía ha podido devolver alrededor de 134.000 euros.
– La rápida actuación de la policía evitó que aumentara el número de daños penales, afirma el jefe de la investigación, el comisario del crimen Teemu Haapala en el boletín de la policía.
– A principios de junio, la policía realizó detenciones en distintas direcciones y varios sospechosos siguen detenidos.
La policía afirma en su comunicado que en actos dirigidos al extranjero se estima que el daño criminal supera el millón de euros.
Según la policía, los sospechosos fueron localizados en mayo. La investigación preliminar continúa con la cooperación internacional. Las autoridades están tratando de averiguar, entre otras cosas, cómo operaba el grupo criminal organizado en la región de la capital antes de las detenciones.
La policía o los bancos nunca piden a la gente que realice transferencias bancarias ni entreguen credenciales bancarias para su uso, recuerda la policía.
– Si recibe este tipo de llamadas o mensajes, deberá ponerse en contacto con su banco. La información de contacto se puede encontrar en los sitios web de los bancos.
La investigación preliminar finalizará en diciembre. El asunto está siendo investigado por los departamentos de policía de Helsinki y Finlandia Interior junto con la Policía Criminal Central.