El cambio en la cúpula de la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado, con los M5 excluidos de la presidencia, hizo estallar las tensiones en la mayoría. Giuseppe Conte subió a las barricadas por el “atraco” contra las 5 estrellas, atronó contra el centroderecha y IV y puso en entredicho directamente al primer ministro Mario Draghi. Un todo contra todo que el Palazzo Chigi no ha comentado en modo alguno, pero que trae vientos de crisis. El no a un mayor envío de armas a Kiev es una posición que ve, en parte, la misma línea de M5 y Lega. Pero la línea del primer ministro Draghi es diferente: Italia quiere “ayudar a Ucrania a defenderse” y seguirá haciéndolo “cuando sea necesario”. En esto los europeos estamos todos juntos” y nosotros “somos miembros leales de la Unión”.
Craxi: atlantismo sin excepciones ni subordinación
También hizo profesión de fe atlántica la recién electa presidenta de la Comisión de Asuntos Exteriores del Senado, Stefania Craxi, quien declaró: “La política exterior de un gran país como Italia, por razones culturales y de valores, antes que por razones históricas y geopolíticas, no puede fallan tienen claras connotaciones atlánticas, un atlantismo de la razón que no admite excepciones pero tampoco acepta la subordinación”
La revelación de Draghi a las Cámaras
Sobre el tema de la guerra en Ucrania, el primer ministro deberá volver con más detalle en la información a la Cámara y al Senado del 19 de mayo: un discurso amplio, que se centrará en el compromiso con la paz (ya durante la jornada subrayó que no deben interrumpirse los canales diplomáticos), pero que afectará a todas las facetas y consecuencias de la guerra en Ucrania: desde las sanciones decididas con los socios europeos, hasta el riesgo de una crisis alimentaria de gran calado para los países más pobres.
Las divisiones en la mayoría
Sin embargo, los expedientes en los que la mayoría está dividida mientras tanto aumentan día a día. Van desde el tira y afloja por las armas hasta la batalla contra la planta de conversión de residuos en energía de Roma, hasta los balnearios en los que aún no se ha llegado a un acuerdo. Y uno se pregunta hasta dónde llegará Conte, si realmente intentará desconectar al gobierno y, posiblemente, cuántos pentastellati electos lo seguirían.
La agenda de Alternativa sobre las armas fue rechazada
Hasta la fecha, los números se mantienen, con la confianza votada tanto en la Cámara (sobre el decreto ley bis Ucrania) como en el Senado (sobre la reapertura dl). No solo. La mayoría de los diputados, incluidos los M5, rechazaron una agenda presentada por Alternativa para comprometer al Gobierno a “evaluar la posibilidad de suspender la concesión o cualquier acto de autorización para la exportación de medios, materiales, equipos militares y armas letales”.