El boxeador ruso, trasplantado a California, que derrotó a Canelo Álvarez para confirmarse como campeón de los semipesados ha sido calificado como la mayor sorpresa boxística del siglo XXI. Aquí está su historia
La han llamado la mayor sorpresa boxística del siglo XXI y ciertamente hace mucho ruido la caída de Canelo Álvarez. Pero el triunfo de Dmitry Bivol, decididamente más amplio que los dos puntos sancionados por las tarjetas de los tres jueces, levantó una ceja solo para aquellos que no conocen el valor del campeón ruso (y la referencia se quiere para los expertos estadounidenses, que básicamente se niegan a considerar a boxeadores que vienen de Europa del Este aunque residan en EEUU, como él).