el alto consejo confirma la condena de Thijs H. por tres asesinatos. Según el tribunal superior, el tribunal no cometió ningún error al condenarlo a 22 años y TBS.
Thijs Hermans, que a petición suya menciona su nombre completo, recibió esta sentencia por el asesinato premeditado de tres caminantes al azar. El 4 de mayo de 2019, mató a puñaladas en un parque de La Haya a una mujer que paseaba a sus perros, y tres días después volvió a apuñalar a otros dos paseantes en Brunsummerheide.
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El tribunal de Den Bosch que condenó a Hermans determinó que éste padecía un trastorno mental durante los asesinatos, pero que al mismo tiempo trabajó de forma sistemática y tomó decisiones racionales conscientemente. Por lo tanto, el tribunal se desvió del asesoramiento pericial, que dictaminó que Hermans debería haber sido declarado completamente incompetente debido a una psicosis. La Corte Suprema ha determinado ahora que los jueces pueden decidir por sí mismos si existe un desorden y también en qué medida ese desorden hace que un sospechoso sea parcialmente incompetente.
Psicosis
Hermans estaba en psicosis y actuó porque se le indicó que lo hiciera dentro de su realidad psicótica, establecieron investigadores del Centro Pieter Baan durante el ensayo. Llegaron a la conclusión de que Hermans era completamente irrazonable. Las decisiones aparentemente racionales que tomó Hermans durante los crímenes, como elegir a sus víctimas y apagar su teléfono, también deberían explicarse por esa psicosis.
El Centro Pieter Baan incluso señaló una posible causa de la psicosis: la droga dexanfetamina. A Hermans le recetaron esto la institución de salud mental de Mondriaan. Al recetarle ese medicamento, Mondriaan no tuvo en cuenta los posibles episodios psicóticos previos de Hermans y le diagnosticó TDA. Un diagnóstico erróneo, según el Centro Pieter Baan, que determinó que Hermans ya estaba psicótico seis meses antes de los asesinatos y había cometido un grave intento de suicidio. Por lo tanto, la prescripción de dexanfetamina, una droga que induce psicosis, puede haber resultado en la psicosis en la que Hermans cometió los asesinatos.
Serias dudas
Las conclusiones y el consejo de declarar a Hermans incompetente fueron confirmados por un segundo informe pericial del Instituto Holandés de Psiquiatría Forense. Un tercer informe, encargado por el tribunal, no llegó a ninguna conclusión ni consejo. En sus propias palabras, los nuevos investigadores recibieron “una visión insuficiente de la percepción que Hermans tenía del mundo”. Pero en su informe expresaron serias dudas sobre la psicosis e incluso sobre la gravedad de un intento de suicidio seis meses antes.
Basándose en parte en ese tercer informe, el tribunal no llegó a ninguna conclusión sobre si Hermans era psicótico. Llegó a la conclusión de que Hermans era en parte responsable debido a sus acciones aparentemente racionales.
Este razonamiento generó muchas críticas en el mundo de la psiquiatría forense, que acusaba a los jueces de ocupar el lugar del psiquiatra.
En su sentencia de hoy, el Tribunal Supremo introdujo un “marco de evaluación para responder a la pregunta de si un delito imputado puede atribuirse al sospechoso”. Este marco de evaluación significa que los jueces pueden determinar por sí mismos, independientemente de los informes periciales, si un sospechoso sufre un trastorno que le permita ver la criminalidad de sus propias acciones.
El Tribunal Supremo establece así que la condena del tribunal por triple asesinato con premeditación “no está incomprensiblemente motivada” y, por tanto, se confirma. El Tribunal Supremo redujo la pena impuesta en dos meses, porque el caso ya lleva más de cuatro años.
Por tanto, el caso es irrevocable desde el punto de vista del derecho penal. Sin embargo, todavía hay un proceso civil de Hermans contra Mondriaan por los errores cometidos durante su tratamiento; por el momento se mantiene en secreto una evaluación interna al respecto. También existe una denuncia disciplinaria contra los ponentes del tercer informe.