Los cambios en el plan de incentivos Transición 5.0 han llegado a su meta tras una turbulenta negociación con la Comisión Europea. Están el fortalecimiento de las tarifas y las simplificaciones. Pero sorprendentemente, al final, aparentemente por problemas de alineación de recursos recaudados por el Ministerio de Economía, se salta la ampliación del 31 de diciembre de 2025 al 30 de abril de 2026 del plazo para realizar inversiones. Por lo tanto, lo que se consideraba el antídoto a las notables dificultades de implementación que han frenado a la mayoría de las empresas está pasando sólo parcialmente, con reservas de créditos fiscales aún estancadas en menos del 5% de los más de 6.200 millones de fondos del Pnrr disponibles. La modificación del Gobierno a la ley presupuestaria, fruto del trabajo del Ministerio de Empresa y Made in Italy dirigido por Adolfo Urso, fue depositada ayer en la Comisión de Presupuesto de la Cámara.
Según el régimen actualmente vigente, los incentivos cubren inversiones de hasta 50 millones de euros. La modificación reduce los tramos de tres a dos, aumentando el tipo para la parte de proyectos de entre 2,5 y 10 millones, en la que se concentran la mayor parte de los planes de las pequeñas y medianas empresas. En detalle, en este tramo de gasto el beneficio sube del 15% al 35% si el ahorro energético logrado se sitúa entre el 3 y el 6% en referencia a la estructura productiva o entre el 5 y el 10% en relación al proceso afectado por la ‘inversión; aumenta del 20 al 40% con reducciones energéticas de entre el 6-10% y el 10-15% respectivamente; se incrementa del 35% al 45% en los casos de máxima eficiencia, es decir, más del 10% para la estructura y más del 15% para el proceso. La retroactividad de estos aumentos, para las inversiones realizadas a partir del 1 de enero de 2024 y hasta la entrada en vigor de la ley de presupuesto, está sujeta a una comunicación específica del GSE en función de la disponibilidad de recursos dentro del techo del Pnrr.
Las demás innovaciones, a partir de la lectura de la ley, aparecen automáticamente con carácter retroactivo. Se potencian las ventajas para la compra de paneles fotovoltaicos. La norma original establece que la inversión en planes que incluyan los módulos fotovoltaicos más eficientes contribuya a formar la base para calcular el crédito fiscal por un importe igual, según el tipo de producto, al 120% o al 140% de su coste. Ahora los porcentajes suben al 140 y 150% respectivamente y la categoría de eficiencia inmediatamente inferior (la más barata del mercado) también está “superincentivada”, con un aumento del 130%.
También se da luz verde a la combinación con otros incentivos, una apertura muy esperada por las empresas. La enmienda contiene no sólo la posibilidad de añadir el beneficio al crédito fiscal para las inversiones en la zona económica especial del Sur, sino también, sorprendentemente (el punto más complicado de la negociación con Bruselas), la acumulación con otros beneficios financiados por la UE. siempre que la ayuda no cubra los mismos costes compartidos e inversiones individuales que el proyecto de innovación.
En el ámbito de la simplificación, sin embargo, se introduce el cálculo automático de la reducción del consumo energético de los bienes de equipo adquiridos que sustituyen a bienes de características tecnológicas similares y totalmente amortizados durante al menos 24 meses. En este caso, la eficiencia se considera automáticamente del 3% en referencia a la estructura productiva y del 5% para los procesos involucrados, sin perjuicio de la posibilidad de demostrar un resultado superior. Además, la reducción del consumo se considera conseguida en el caso de proyectos de innovación realizados a través de una Esco (Empresa de servicios energéticos) en presencia de un contrato de eficiencia energética en el que se prevé expresamente el compromiso de alcanzar los ahorros mínimos mencionados anteriormente. . En cuanto a las ESE, la enmienda también establece que podrán acceder directamente a créditos fiscales por proyectos de inversión realizados en la empresa cliente.