El Ministerio holandés de Asuntos Exteriores confirmó el viernes la muerte de un joven de 18 años procedente del norte de Holanda. Según los medios tailandeses, la familia se encontraba el miércoles por la mañana en Dragon Crest, una montaña que domina el Parque Nacional Khao Ngon-Nak.
Durante la larga caminata, el niño esperaba a sus padres junto a una cascada. Estaban consiguiendo comida y bebida un poco más lejos. Una vez de regreso, el joven residente de Heiloo no apareció por ningún lado y no contestó su teléfono celular.
Al bajar de la montaña, los padres encontraron ayuda en un pueblo y se inició una búsqueda a gran escala. La búsqueda continuó toda la tarde y toda la noche. Cuando se captó la señal del celular del niño, llegaron a un alto acantilado. Los rescatistas encontraron su cuerpo en el fondo luego de hacer rappel.
Las autoridades tailandesas sospechan que cometió un desliz.