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Toyota ha revelado sus ambiciones de reducir a la mitad el tamaño, el costo y el peso de las baterías para sus vehículos eléctricos luego de un gran avance en su tecnología de baterías de estado sólido.
El principal experto en baterías del fabricante de automóviles japonés dijo el martes que simplificar el proceso de producción de materiales para baterías reduciría el costo de su tan esperada tecnología de próxima generación.
“Nuestro objetivo es cambiar drásticamente la situación en la que las baterías actuales son demasiado grandes, pesadas y caras, tanto para nuestras baterías de estado líquido como para las de estado sólido”, dijo Keiji Kaita, presidente del centro de investigación y desarrollo de Toyota para la neutralidad de carbono. “En términos de potencial, nuestro objetivo será reducir a la mitad todos estos factores”.
Los comentarios se producen después de que el fabricante de automóviles más grande del mundo por ventas sorprendiera a los inversores el mes pasado con planes para comercializar su tecnología de batería de estado sólido en un vehículo eléctrico para 2027 como muy pronto. Toyota también está trabajando en la tecnología con Panasonic a través de su empresa conjunta de baterías.
Los expertos de la industria han anunciado durante mucho tiempo que las baterías de estado sólido son la tecnología más prometedora para resolver los problemas de las baterías de vehículos eléctricos, como el tiempo de carga, la capacidad y el riesgo de incendio. Reemplazan un electrolito líquido por uno sólido y utilizan metal de litio en el ánodo en lugar de grafito, el estándar actual en las baterías de iones de litio.
Pero la tecnología sigue siendo cara y difícil de producir, lo que obliga a los fabricantes de automóviles a retrasar su lanzamiento y centrar sus esfuerzos en el desarrollo de baterías de iones de litio de base líquida.
Toyota inicialmente dijo que quería comenzar a vender autos híbridos pero no eléctricos con baterías de estado sólido antes de 2025.
Pero el martes, Kaita dijo que la compañía descubrió formas de abordar los problemas de durabilidad de hace unos tres años y ahora tenía la confianza suficiente para producir en masa baterías de estado sólido en vehículos eléctricos para 2027 o 2028.
Toyota afirmó que había logrado un «avance tecnológico» para resolver los problemas de durabilidad y «una solución para los materiales» que permitiría que un vehículo eléctrico alimentado por una batería de estado sólido tuviera un alcance de 1200 km y un tiempo de carga de 10 minutos o menos.
“Todos nuestros miembros están muy motivados y están trabajando con la intención de lanzar definitivamente” la tecnología en el plazo prometido, dijo Kaita.
Al reducir la cantidad de procesos necesarios para fabricar materiales para baterías, el costo de las baterías de estado sólido podría reducirse a niveles similares o más baratos que las baterías de iones de litio de base líquida, agregó.
Para Toyota, que ha tardado más que sus rivales en lanzar vehículos eléctricos, los analistas dijeron que las baterías de estado sólido podrían ser un «cambio de juego» para reducir la brecha con Tesla.
Las acciones de Toyota han subido un 13 por ciento desde que la compañía anunció su plan de baterías de estado sólido el mes pasado. Pero Hiroki Nakajima, su director de tecnología, advirtió que la empresa no veía necesariamente la tecnología como «la solución definitiva» para los desafíos de las baterías.
“También hay margen de mejora para las baterías de base líquida”, dijo Nakajima. “El quid de la competencia de baterías EV será, en última instancia, el valor agregado del automóvil como producto y cuánto podemos controlar el volumen general de las baterías y cuán efectivamente podemos usarlas”.