Tomen juntos una taza de café todos los días en la cantina: en el club de fútbol Vogelenzang no conocen nada mejor

También se ha sumado el voluntario Fons Vinken (70). «Soy el ayudante de Hans», se ríe. «Y soy presidente de un club de personas que apoyan al club con una contribución anual. Donamos ese dinero y lo utilizamos para comprar balones, por ejemplo».

Del campo junto a la finca al complejo deportivo

Desde su fundación, el SV Vogelenzang se ha mudado regularmente. «Todo empezó en un campo al lado de una granja y luego nos mudamos varias veces», explica Hans. El club de fútbol está situado al lado de un club de tenis y ahora van a cambiar de posición. «Primero tenemos que trasladar las canchas de tenis a uno de nuestros campos. Luego se puede derribar el comedor y probablemente también estará listo el nuevo comedor. Luego lo usaremos juntos».

Los campos de fútbol se podrán trasladar al lugar donde se encuentran las actuales canchas de tenis. «Pronto tendremos un campo y medio de césped artificial. Un campo principal y un campo de entrenamiento», continúa Hans. «Desafortunadamente, el número de campos también es cada vez menor, pero esa es la realidad. Somos un club pequeño».

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