Broadcom adquirirá VMware este miércoles 22 de noviembre por 61 mil millones de dólares, más 8 mil millones de dólares en recompras de deuda. Las dos empresas lo anunciaron el día anterior, inmediatamente…
Broadcom adquirirá VMware este miércoles 22 de noviembre por 61 mil millones de dólares, más 8 mil millones de dólares en recompras de deuda. Las dos empresas lo anunciaron la víspera, inmediatamente después de obtener la aprobación de la autoridad china de competencia. Algunos lo ven como una señal más del deshielo en las relaciones entre Beijing y Washington.
Una operación lógica, pero analizada
En un comunicado, la Administración Estatal para la Regulación del Mercado, la agencia antimonopolio de China, ” decidió aprobar esta concentración de empresas “. Noticia seguida inmediatamente por un mensaje de Broadcom felicitándose por tener “ recibió todas las aprobaciones regulatorias requeridas y tiene la intención de completar la adquisición “.
Al igual que la Comisión Europea, que validó la operación en julio, Pekín fijó ciertas condiciones. El principal es hacer que el software de VMware sea interoperable con las empresas de hardware que compiten con Broadcom. La empresa especializada en productos de servidores deberá proteger la información confidencial de sus competidores, los clientes de VMware. Se implementará una supervisión de la correcta aplicación de estas condiciones.
Broadcom lleva varios años ampliando su negocio de software. Esto comenzó especialmente con la adquisición de CA Technologies, especializada en gestión de proyectos, en 2018 por 19.000 millones de dólares. Al año siguiente, la empresa estadounidense se hizo cargo de Symantec, que se dedicaba a la ciberseguridad. Con VMware adquiere una empresa de servicios multinube para todas las aplicaciones. Sinergias percibidas como coherentes por los analistas.
Las prisas de Broadcom por finalizar la fusión iniciada en mayo de 2022 se explica por el final de los plazos, fijado para el 26 de noviembre. Inicialmente estaba previsto que la operación finalizara el 30 de octubre, pero Beijing presentó un obstáculo problemático.
Broadcom víctima de la geopolítica
Para los observadores, la aprobación de esta adquisición se vio complicada por las tensiones entre China y Estados Unidos. El examen de la solicitud de Broadcom fue suspendido en particular por una objeción del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, mientras Washington se preparaba para reforzar las restricciones a la exportación de semiconductores.
El director de Broadcom, Hock Tan, ha intensificado sus esfuerzos de lobby para convencer a Pekín. Esfuerzos que continuaron durante la visita de Xi Jinping a San Francisco, con motivo del foro anual de Cooperación Económica Asia-Pacífico.
Elementos que nos alientan a ver en la decisión de la Administración del Estado de regular los mercados un nuevo gesto de relativo deshielo en las relaciones chino-estadounidenses.