Se supone que el cantante Till Lindemann desembolsará más de 600.000 euros, pero hay inconsistencias.
Esto podría resultar caro: el líder de Rammstein, Till Lindemann, deberá devolver 67 millones de rublos (el equivalente a 635.000 euros) por un concierto en la ciudad rusa de Tver que supuestamente canceló. El cantante recibió el dinero por una aparición prevista en el festival “McLaren for the Motherland”, pero nunca lo devolvió después de su cancelación.
¿Dinero fácil?
Así lo informó el lunes (18 de noviembre) el periódico económico ruso RBK, amigo del Kremlin. Citó una decisión del Tribunal de Arbitraje Comercial Internacional, que depende de la Cámara de Comercio e Industria de la Federación de Rusia. Los documentos hablan de una “reclamación por enriquecimiento injusto por importe de 635.400 euros de Till Lindemann a favor de Prime Marketing LLC”. Esta es la empresa que organizó el concierto. Además, el nativo de Leipzig debería reembolsar al demandante los costes de los honorarios del arbitraje, que ascienden a casi 30.000 euros.
El fallo judicial afirma que Lindemann había acordado con la compañía ofrecer un espectáculo de 70 minutos en el festival en agosto de 2021. Al artista se le pagó íntegramente por adelantado. Sin embargo, tras su rechazo, no devolvió el dinero.
No todo rima en el lamento
El panorama general del incidente, sin embargo, es un poco más complicado. Porque no fue Lindemann quien canceló su concierto. Las autoridades rusas cerraron oficialmente el evento debido a las restricciones de Covid-19 sobre eventos grandes. Según varios medios de comunicación, el cantante incluso recibió la visita de agentes de policía rusos la noche anterior al concierto. Los agentes del orden le advirtieron sobre las posibles consecuencias de su aparición. Cualquier incumplimiento daría lugar a sanciones administrativas y penales.
Maxim Larin, organizador del festival “McLaren for the Motherland”, sospechó en ese momento de otra razón para el cierre. En aquel momento se presentaba como candidato por el partido de oposición Rodina a las elecciones regionales y creía que su rechazo tenía una relación política.
Rammstein ofende, también en Rusia
Till Lindemann y su banda Rammstein son muy populares en Rusia. Sin embargo, los funcionarios llevan mucho tiempo mirando a Rammstein con recelo. Por ejemplo, después de una actuación en agosto de 2019: los guitarristas de Rammstein, Richard Kruspe y Paul Landers, se besaron en el escenario de un estadio de Moscú. Un escándalo en la Rusia de Putin.
El estado ha prohibido la homosexualidad y a los miembros de la comunidad LGBTQ+ desde 2013. La imagen de esta escena circuló en las redes sociales, con las palabras: “Rusia, te amamos”. Los políticos del Kremlin pidieron a Rammstein que se abstuviera de tales apariciones en Rusia en el futuro.