Con el doblete ante el Cagliari, Lautaro se convierte en el sexto jugador del Inter en marcar al menos 20 goles antes de cumplir los 25. Pero quiere la tricolor y ahora necesitamos medio milagro
A Lautaro Martínez simplemente no le gustan las medias tintas. Probado en todas las localidades por la abstinencia a principios de 2022, desde principios de marzo el Toro ha marcado 10 goles. Nadie como él. La guinda llegó con el doblete ante el Cagliari, pese a que los locales no animaban. De hecho, el Inter saltó al campo con estadio ante el Milan, que ya tenía el espumoso en las manos y el cansancio para la batalla triunfal de 120 minutos ante la Juve. Sin embargo, Lautaro ha encarnado el espíritu de un equipo que nunca se domestica.
Récord y decepción
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Los 21 goles en Liga mejoran su registro personal (17, ya batidos) y hacen entrar a Lautaro en la élite nerazzurri. De hecho, solo otros 5 jugadores en la historia del club habían sido capaces de marcar al menos 20 goles antes de cumplir los 25. Sin embargo, en el club con Giuseppe Meazza, Stefano Nyers, Antonio Angelillo, Ronaldo y Mauro Icardi, Toro ciertamente no puede alegrarse. Tras la Supercopa y la Copa de Italia, el bahiano de 24 años (tierra de campeones como Daniel Bertoni, Manuel Ginóbili y Rodrigo Palacio) quiere el Scudetto a toda costa. Esperaba que sus goles valieran la pena adelantar antes de la última curva. En cambio, el Milan estuvo a la altura y ahora solo quedan Sassuolo y Sampdoria para el medio milagro. “Fue un partido difícil -dijo Toro al final del partido-, teníamos que venir aquí a ganar y lo logramos. Cuando perdimos contra el Bologna, perdimos puntos demasiado importantes y ahora hay que ganar en casa y luego espera. El partido de Dall’Ara fue el más importante porque teníamos un partido menos. Pero hay esperanza, porque todavía hay una oportunidad”.
carrera total
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El hecho es que el Inter tuvo que hacer de las suyas y no traicionó. Arrastrado por un Toro asolado, que pudo marcar hasta cinco goles. De hecho, de los tres postes de los nerazzurri, uno es suyo, con un gran giro de zurda. Y en la réplica sirvió un milagro de Cragno para negarle la primera alegría. Lauti, como le llaman sus compañeros, ya lo había intentado antes -buen Ceppitelli al final-, pero lo recompensó al comienzo de la segunda parte. En el lanzamiento largo de Barella, colocó un gran sprint, controló la volea, resistió el regreso de Altare y mató a Cragno. El vigésimo sello, sin embargo, no fue suficiente, porque el Inter especialista en complicarse la vida se quedó contra las cuerdas por culpa de Lykogiannis y luego al final Toro le puso el toque característico: clavada de zurda a la baba de Gagliardini.
Centralidad y valor
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Lautaro está en un estado de forma increíble, que va más allá de los números. Ahora que es intocable en las rotaciones y juega más de centro -gracias a los movimientos del compañero atacante-, porque en el área de penalti sabe convertirse en puro veneno. Siempre en el centro de los rumores del mercado, Lautaro no quiere irse del Milán. Y el Inter ya jugó al bingo de todos modos, porque hazaña tras hazaña el valor del ex Racing está destinado a subir como un soufflé. Antes 70-80 millones habrían sido suficientes, ahora el listón ha subido.
16 de mayo – 07:23
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