El holandés parecía estar retrasado y la cuestión de la renovación siempre pende de él. En seis meses tendrá libertad para pactar con otros equipos, al igual que Skriniar. Los nerazzurri corren el riesgo de encontrarse en una situación incómoda
En la agenda de Inzaghi, en lo alto de la lista debe haber un capítulo dedicado a Stefan De Vrij. El mismo nombre que, por diferentes motivos, figura entre las próximas prioridades de Ad Beppe Marotta. Porque si por un lado el último ensayo en Cesena ha vuelto a plantear viejos avisos en el centro de la defensa, donde el holandés fue fatal otras tantas veces en la última temporada, con el paso de los días el tema de la renovación se torna cada vez más más complicado bajo un contrato que vence el próximo junio.