El director de televisión de Talpa, Frans Klein, está abierto a conversar con organizaciones judías sobre las declaraciones de Johan Derksen tras el ataque de Hamás a Israel. Así lo afirmó un portavoz del canal a la ANP.
Ronny Naftaniel, ex director del Centro de Información y Documentación de Israel (CIDI), envió una carta a Klein el miércoles. En él pedía a Talpa que se distanciara de las declaraciones de Derksen. La personalidad de televisión dijo al aire. Hoy dentro el lunes que “los judíos más o menos lo pidieron”.
“Estamos encantados de poder discutir esto con organizaciones sociales, también sobre este tema”, afirma el portavoz de Talpa. Sin embargo, el propio medio de comunicación destaca que aún no ha visto la solicitud de Naftaniel. Talpa no quiere decir si se ha discutido el asunto con Derksen: “No compartimos con el mundo exterior cómo discutimos este tipo de asuntos internamente”.
El fin de semana pasado Israel fue atacado por Hamás, tras lo cual Israel bombardeó extensamente la Franja de Gaza. Más de mil personas han muerto en ambos bandos. Derksen dijo en el programa de entrevistas “que los judíos en cierto modo lo pidieron, porque esos palestinos en realidad fueron tratados como perros”.
En la emisión del martes, Derksen indicó que debería haber dicho “gobierno israelí” en lugar de “judíos”, lo que considera una generalización. Además, Derksen apoya “plenamente” sus afirmaciones.
‘Su brújula moral está completamente rota’
Esto no es suficiente para Naftaniel y su sucesora Naomi Mestrum, actual directora del CIDI. Según Naftaniel, “los comentarios de que los judíos son culpables de su propia miseria están profundamente arraigados en la ideología antisemita”. Pide enfáticamente a Talpa como empresa que se distancie de los comentarios y que a partir de ahora deje que Derksen “sólo hable de deportes que él parece conocer”.
Con este llamado también coincide el actual director del CIDI, Mestrum. “Es doloroso y reprensible cuando, en un programa tan ampliamente visto, se establece sin escrúpulos el vínculo entre los problemas de Israel y los de todos los judíos en general”, dijo Mestrum.
“Su brújula moral está completamente rota. Este tipo de comentarios, incluso si luego tienen matices, agitan el odio y alimentan el antisemitismo. Tenemos que alejarnos de la polarización de este problema. Y estos son, en el mejor de los casos, torpes y al menos Lo peor es que el repugnante comentario de Derksen no contribuye a ello.”