Si los felinos se han domesticado, conquistando nuestro corazón, nuestro salón e incluso nuestra cama, solo hay una razón, explica la experta en comportamiento animal Sarah Brown: han aprendido a comunicarse con nosotros. Así es como lo hacen, desde el maullido hasta la forma en que mueven la cola. E instrucciones para el uso de mimos y caricias.

Enseña genética en la Universidad de L’Aquila, donde con el Laboratorio de Mutagénesis estudia el daño ambiental al ADN e investiga a los antiguos habitantes de Amiternum. Todos los días se permite hermosos paseos y muchos mimos a los gatos.