«Tenía menos de 25 años, era primavera. Me miré los dedos: estaban azules, sólo porque estaba en la sombra». Galetti, ahora vicepresidente de Gils y Fesca, recuerda así los albores de su enfermedad. Y luego el diagnóstico, dificultad para respirar, fibrosis pulmonar, úlceras, miedo en el período de Covid y, hoy, la perspectiva de un trasplante de pulmón. Un testimonio, en el Día de la Esclerosis Sistémica, para hablar de una enfermedad autoinmune crónica que afecta 5 veces más a las mujeres que a los hombres. Causas desconocidas, incluso síntomas muy graves, el diagnóstico precoz es fundamental

Enfermedad crónica: ella y yo, casi amigas