La Autoridad de Competencia anunció este miércoles que interrogará a las empresas del sector de la inteligencia artificial generativa (IA), así como a sus clientes y proveedores. Al investigar el asunto, la autoridad antimonopolio intentará determinar si los líderes del sector, Google, OpenAI o Microsoft, entre otros, no han abusado de su posición dominante en los últimos meses.
La Autoridad de Competencia quiere evitar la concentración en el mercado de la IA generativa
El mercado de la IA generativa está en auge. Para 2028, podría valer casi 100.000 millones de dólares y potencialmente duplicar ese valor a principios de la próxima década. Ante el entusiasmo que despierta esta tecnología, la Autoridad de Competencia ha decidido lanzar una consulta pública durante seis semanas. Hasta el 22 de marzo, todos los actores de la IA generativa, pero también las organizaciones clientes, están invitados a responder a un cuestionario centrado principalmente en la competencia.
En la mira del regulador, las colaboraciones entre gigantes tecnológicos y empresas que desarrollan herramientas de IA generativa. Como indica la Autoridad de Competencia en un comunicado de prensa, los grandes actores digitales tienen una ventaja significativa en este mercado. El desarrollo y operación de soluciones de IA requiere una gran potencia informática, grandes bases de datos de capacitación y una fuerza laboral calificada. Los grandes grupos especializados en computación en la nube comprueban estos tres criterios, a diferencia de las empresas emergentes.
El ejemplo más concreto sigue siendo la participación de Microsoft en OpenAI. Al inyectar casi 13 mil millones de dólares en la empresa detrás de ChatGPT, el gigante tecnológico se concedió el 49% de su capital. Esta asociación ha atraído mucha atención, ya sea en Francia, el Reino Unido o los Estados Unidos. En enero, la Comisión Federal de Comercio anunció la apertura de un estudio en profundidad. El organismo antimonopolio estadounidense está investigando si las inversiones de los gigantes tecnológicos en nuevas empresas de inteligencia artificial corren el riesgo de conducir a una consolidación del mercado.
Por su parte, la Autoridad de Competencia no ha abierto formalmente una investigación. Sin embargo, en función de las respuestas que obtenga, deberá formular un dictamen sobre la IA generativa antes del verano. Esto abarcará desde emitir algunas recomendaciones destinadas a remediar mejor los posibles efectos perjudiciales de estas inversiones hasta iniciar investigaciones, si fuera necesario.