Dos ciudadanos australianos nacidos en Rusia han sido arrestados y acusados en el país por espiar en nombre de Rusia como parte de una operación policial “compleja” denominada en código BURGAZADA.
Entre ellos se encuentran una mujer de 40 años, soldado raso del ejército de las Fuerzas de Defensa de Australia (ADF), y su marido, un trabajador autónomo de 62 años. Informes de los medios tener identificado ellos como Kira Korolev e Igor Korolev, respectivamente, y señalaron que habían estado en Australia durante más de una década.
La pareja fue detenida en su domicilio en Everton Park, un suburbio de Brisbane, el 11 de julio de 2024, según informó la Policía Federal Australiana (AFP) en un comunicado. Se les imputa un delito de preparación para un espionaje, que conlleva una pena máxima de 15 años de prisión.
“Es la primera vez que se presenta un delito de espionaje en Australia desde que la Commonwealth introdujo nuevas leyes en 2018”, informó la AFP. dicho.
La agencia federal encargada de hacer cumplir la ley alegó que la pareja se confabuló para obtener información confidencial después de que la mujer viajara a Rusia mientras disfrutaba de una licencia prolongada de la ADF desde 2023.
Se dice que ella ordenó a su esposo, que permanecía en Australia, iniciar sesión en su cuenta de trabajo oficial y le ordenó acceder a información específica y enviarla directamente a su cuenta de correo electrónico privada mientras ella estaba en el extranjero.
“Las credenciales de la cuenta ADF de la mujer fueron utilizadas en varias ocasiones para acceder a información sensible de la ADF, con la intención de proporcionarla a las autoridades rusas”, afirmó la AFP.
Aunque no se revelaron los documentos exactos a los que se tuvo acceso, la AFP afirmó que estaban relacionados con intereses de seguridad nacional australianos. La investigación para determinar si la información fue entregada a Rusia sigue en curso.
“El espionaje es un delito insidioso y, en un momento de inestabilidad global, los actores estatales han intensificado sus esfuerzos para obtener información en poder de las democracias occidentales, incluida Australia”, declaró el comisario de la AFP, Reece Kershaw.
“El espionaje no es un delito sin víctimas. Tiene el potencial de afectar la soberanía, la seguridad y el estilo de vida de Australia”.
Los arrestos marcan la tercera vez que personas han sido acusadas de espionaje o delitos relacionados con interferencia extranjera desde su incorporación a la Ley del Código Penal de 1995.
El pasado mes de abril, un hombre de Nueva Gales del Sur, de 55 años, fue… cargado con el suministro de información sobre “arreglos económicos, de defensa y de seguridad nacional de Australia” a dos personas asociadas con un servicio de inteligencia extranjero que se sospecha que realizan actividades de recopilación de inteligencia.
Luego, a fines de febrero de 2024, un hombre de 68 años de Melbourne fue… sentenciado a dos años y nueve meses de prisión por intentar influir en un parlamentario federal en nombre de un gobierno extranjero.
Mike Burgess, Director General de Seguridad a cargo de la Organización Australiana de Inteligencia de Seguridad (ASIO), dicho La amenaza constante del espionaje es “real” y “varios países están tratando de robar los secretos de Australia”.