El político hizo que un vendedor ambulante de 21 años fuera trasladado de Lagos al Reino Unido en un jet privado. El propio joven testificó en la corte que fue transferido para un trabajo que él sabía. Le dijeron que las pruebas médicas a las que se sometió eran necesarias para obtener una visa. Al final, el hombre resultó no ser apto como donante.
Además del senador, su esposa y un médico, Obinna Obeta, quien actuó como intermediario, fueron declarados culpables de conspiración en el caso. Su hija Sonia (25), que iba a recibir el riñón, fue absuelta.
El comerciante callejero fue llevado al Reino Unido el año pasado para participar en un trasplante privado en el Royal Free Hospital de Londres. La fiscalía dice que le ofrecieron hasta 7.000 libras esterlinas. Además, la familia también le prometió varias oportunidades en Reino Unido a cambio de su ayuda. No se dio cuenta de lo que estaba pasando hasta que conoció a los médicos en el hospital.
Los acusados supuestamente trataron de convencer a los médicos de Royal Free fingiendo que él era el primo de Sonia, quien tiene una enfermedad debilitante y continúa sometiéndose a diálisis semanalmente, cuando no eran parientes.
Es ilegal donar un riñón si hay una recompensa monetaria u otro beneficio material a cambio.