El cuidado de niños ha estado en el ojo del huracán durante varias semanas después de la muerte de un bebé en ‘t Sloeberhuisje en Mariakerke. Posteriormente, muchos abusos salieron a la luz. El hecho de que el ministro flamenco de Bienestar Social, Wouter Beke (CD&V), no pudiera ofrecer una garantía durante un debate parlamentario de que ningún abusador de niños convicto trabaje en guarderías hizo que el balde se desbordara.
Se dice que el sector ha estado pidiendo un plan de acción durante algún tiempo, pero está decepcionado con lo que Beke propuso a principios de esta semana: un plan con un enfoque que es “exclusivamente en la inspección y la aplicación”. Varias organizaciones paraguas, sindicatos y expertos ahora están uniendo fuerzas en un consorcio que está poniendo siete puntos de acción sobre la mesa para abordar las necesidades fundamentales.
“El reconocimiento social y las condiciones previas para los empleados de cuidado infantil son actualmente desproporcionados con respecto al importante trabajo que realizan todos los días: ayudar a sentar las bases para un desarrollo equilibrado de los niños”, suena. Para volver a encontrar el equilibrio, el sector aboga, entre otras cosas, por reducir drásticamente el número de niños por supervisor a una proporción de un niño supervisor por cada cinco niños. Una ratio que además debe ser flexible en función de las necesidades de apoyo y la edad.
Actualmente, una acompañante es responsable de ocho o nueve bebés y niños pequeños, una de las peores puntuaciones de toda Europa. Esto no solo es una desventaja porque “los bebés y los niños pequeños necesitan suficiente atención, comodidad y estimulación”, según el consorcio, sino que también sería una razón para que muchos proveedores de cuidado infantil abandonen el sector o lo abandonen.
Además, el consorcio pide centrarse en una mejor formación básica y oportunidades para crecer o seguir aprendiendo, de modo que suficiente personal de calidad pueda encontrar su camino hacia el cuidado de los niños. También quieren mejores salarios y condiciones de trabajo, y los padres deberían tener más libertad de elección con respecto a las iniciativas de cuidado infantil.
Está claro que el sector está aprovechando el momento para poner fin por fin a lo que califica como “años de lamentaciones”. El jueves, también se anunció que los sindicatos han presentado un aviso de huelga para el cuidado de niños el 25 de marzo, alineándose así con una acción que están organizando varias guarderías. Estas guarderías también exigen un ‘plan Marshall’ para una atención de calidad.
Según el consorcio, dicho plan también debe tener en cuenta el largo plazo y los recursos necesarios. “Los recursos operativos deben volver a indexarse para que las organizaciones puedan soportar los costos crecientes”, dijo el consorcio.