Según informes de varios medios de comunicación estadounidenses, el magnate del rap Sean “Diddy” Combs está bajo vigilancia de suicidio en su celda en el distrito neoyorquino de Brooklyn.
No se sabe si Combs corre un riesgo agudo de suicidio. Ni cuánto tiempo lleva siendo observado oficialmente. La revista “People” supo que se trataba de una medida preventiva. Combs aparentemente está en shock después de su arresto el lunes (16 de septiembre). Su condición mental no está clara.
Según el Instituto Nacional Correccional del Departamento de Justicia de Estados Unidos, se trata de una “medida de supervisión para reclusos con tendencias suicidas que requiere observación frecuente”.
La prisión es considerada un famoso molino de huesos.
El Centro de Detención Metropolitano (MDC) alberga a unos 1.600 reclusos. Muchos de ellos están a la espera de juicio. La prisión se considera un famoso molino de huesos. Los informes internos dicen que no hay suficiente personal.
Este verano un recluso fue asesinado. Al menos cuatro reclusos se han suicidado en los últimos tres años. El banquero de inversiones del escándalo Jeffrey Epstein se suicidó en el MDC en 2019.
Prisioneros destacados
En los últimos años, varios reclusos destacados han sido encarcelados en el “infierno” de Brooklyn. Estos incluyen al ahora convicto rapero R. Kelly, el hombre de confianza de Epstein, Ghislaine Maxwell, el criptoempresario caído Sam Bankman-Fried, el administrador de fondos de cobertura Martin “Pharma Bro” Shkreli y (brevemente) el fraudulento organizador del FyreFest Billy McFarland.
En su solicitud de libertad bajo fianza, los abogados de Combs escribieron que “varios tribunales de distrito ya han reconocido que las condiciones en el Centro de Detención Metropolitano no son propicias para la prisión preventiva”.
Según People, el abogado de Combs, Marc Agnifilo, solicitó que el magnate de la música fuera trasladado a una prisión en el condado de Essex, Nueva Jersey, durante una audiencia judicial. La decisión quedó en manos de la Dirección de Prisiones.
Tráfico sexual, trabajos forzados, secuestro
Mientras tanto, hay nuevos detalles de la acusación contra Combs. En consecuencia, “abusó, amenazó y coaccionó a mujeres y a otras personas a su alrededor para satisfacer sus deseos sexuales, proteger su reputación y ocultar su comportamiento”.
Basado en los empleados, los recursos y su influencia en el imperio empresarial multifacético que dirigió y controló. Al hacerlo, creó una empresa criminal cuyos miembros y socios participaron o intentaron participar, entre otras cosas, en tráfico sexual, trabajos forzados, secuestro, incendio provocado, soborno y obstrucción de la justicia”.
Su abogado, Marc Agnifilo, dijo a la revista Vulture: “Es un ser humano imperfecto, pero no es un criminal. Hay que reconocer que ha cooperado muchísimo en esta investigación y se presentó voluntariamente en Nueva York la semana pasada en espera de ser procesado. ¡Por favor, no juzgues hasta que conozcas todos los hechos!