No hay indicios de que sea necesario ampliar el “paquete de medidas de gran alcance” contra la ola de explosiones en Alkmaar, afirma la alcaldesa Anja Schouten. Por lo tanto, a partir de mañana se eliminarán las cinco zonas de riesgo para la seguridad. Sin embargo, por el momento seguirá habiendo cámaras de vigilancia y vigilancia policial adicional en los barrios afectados.
Según el Ministerio Público y la policía, el cacheo preventivo ya no sería necesario gracias a la reducción del riesgo. Por lo tanto, no se prorrogarán los cierres de las tres viviendas de Ruusbroechof, Olieslagerstraat y Lekstraat. Reabrirán en las próximas dos semanas para que los residentes puedan regresar.
Él Supervisión más estricta en las últimas semanas. Parece haber tenido un efecto positivo, explica el alcalde. “Las medidas han funcionado bien. No ha habido nuevos incidentes. Hemos frustrado varias explosiones y diez sospechosos han sido detenidos”, afirma el alcalde Schouten.
No es un juego de niños
La policía y el Ministerio Público informan que seis personas de entre 17 y 24 años siguen en prisión preventiva. Ninguno de los sospechosos es de Alkmaar, sino de Ámsterdam, Rotterdam y Utrecht. “Esto no es un juego de niños ni una broma traviesa, hay una organización detrás de esto”.
Las cámaras permanecerán disponibles durante los próximos meses. Alrededor de abril o mayo se evaluará si esto debe ampliarse. “Si las cosas vuelven a ponerse emocionantes, sin duda podremos ampliarlo nuevamente. Pero espero que esto no sea necesario”, responde Schouten.
Los residentes han sido informados por carta. Los directamente implicados informarán personalmente al ayuntamiento. También se organizan varias veladas para residentes.