La atención médica ucraniana es un objetivo frecuente de la violencia rusa. El bombardeo del hospital infantil de Mariupol el 9 de marzo no fue un incidente sino uno de varios ataques a hospitales. Al menos 111 hospitales y otras instituciones de salud se han visto afectados en 125 ataques, informó la Organización Mundial de la Salud. 73 personas murieron y 51 personas resultaron heridas.
El proceso de verificación llevará unos días y el número de hospitales afectados habrá aumentado aún más. La OMS no ha revelado las ubicaciones exactas de los ataques por razones de seguridad.
Incluso ahora que los rusos se han retirado parcialmente del norte de Ucrania, los hospitales son destruidos a diario, según el gobierno ucraniano. La batalla en el Donbas se intensifica. La OMS confirma que hay alrededor de mil hospitales en las áreas donde ahora hay fuertes combates. Muchos hospitales no tienen electricidad y los suministros de herramientas y medicamentos se están agotando rápidamente. Además, el Ministerio de Educación de Ucrania informa que 928 escuelas han resultado gravemente dañadas o destruidas.
Desde 2019, la OMS lleva un registro estructural de ataques a la atención médica en zonas de guerra en todo el mundo. “Los ataques a la atención médica son una violación de los derechos humanos”, dijo el director de la OMS, Tedros Ghebreyesus, al Consejo de Seguridad de la ONU en marzo. Él cree que la atención a las instituciones de atención médica afectadas en Ucrania está completamente justificada, pero pidió a los líderes mundiales que no pierdan de vista el terrible estado de la atención médica en otros lugares.
Solo en 2022, hospitales o trabajadores de la salud han sido atacados en 12 zonas de conflicto diferentes. En Sudán, las fuerzas de seguridad allanan regularmente los hospitales en busca de manifestantes; usan gases lacrimógenos y disparan contra pacientes y trabajadores de la salud. Cientos de hospitales en Siria han sido bombardeados en los últimos años, dejando a millones de residentes sin acceso a atención médica.