Sanciones más estrictas por violencia contra los delegados de fútbol
En términos concretos, la sanción mínima por incitar a la violencia contra cooperantes y comisarios en la llamada ‘ley del fútbol’ ascenderá próximamente a una multa administrativa de 1.000 euros y una sanción de estadio de dos años. Las penas máximas se mantienen sin cambios: se trata de una multa administrativa de 5.000 euros y una sanción de estadio de cinco años. El proyecto de ley de Franky Demon fue aprobado por unanimidad el miércoles en la Comisión de Interior de la Cámara de Representantes, aunque la facción del PVDA se abstuvo.
Las sentencias más duras vendrán en el contexto del enfoque más estricto del vandalismo, las bombas de humo y el fuego de Bengala que ha anunciado la ministra del Interior, Annelies Verlinden (CD&V). El razonamiento es que, dado que los comisarios son responsables del control a la entrada del estadio, son más vulnerables a la violencia. Lo mismo se aplica al personal de emergencia, que mantiene la seguridad dentro y alrededor del estadio e interviene si es necesario. “Los mayordomos y los socorristas tienen un trabajo duro, a menudo ingrato”, dice Demon. “En esta tarea merecen ser protegidos de manera óptima”.
Según el diputado de CD&V, la violencia contra los comisarios de fútbol y los trabajadores humanitarios en los estadios ahora se castiga al mismo nivel que entrar ilegalmente en un campo de fútbol.