Daniel Ricciardo ya estaba fuera de la Fórmula 1 cuando se le abrió una nueva puerta como tercer piloto de Red Bull tras su temprana salida de McLaren, pero el australiano todavía tenía la expectativa de volver a la cabina regular más adelante esta temporada, no calculada.
Pero la expulsión de Nyck de Vries de AlphaTauri lo hizo posible. El tiempo de descanso de Ricciardo duró menos de lo esperado y, sin embargo, dice: “Creo que me demostró cuánto amo la cosa, cuánto significa para mí”.
“Ahora siento que me han dado una segunda oportunidad, una nueva oportunidad de vida que dice: ‘Está bien, quiero asegurarme de que esta sea mi única prioridad, voy a poner toda mi energía en esto'”. explica el hombre de 34 años.
“Porque no quiero irme un día y decir: ‘Podría haber hecho más’ o ‘Mi carrera se me escapó un poco’. Odiaría sentir eso”, admite. La ruptura le dio “una nueva perspectiva” al respecto. “¡Diría que se lo recomendaría a todo el mundo!”
“Obviamente cada uno sigue su propio camino, pero no puedo creer lo mucho que disfruté la segunda mitad de la temporada. Es una locura lo que pueden hacer seis meses”, se entusiasma Ricciardo sobre su regreso a la Fórmula 1.
Antes de ese momento, el australiano estaba en un lugar completamente diferente y se cuestionaba muchas cosas. “Este deporte debería ser lo mejor que hacemos, ¿verdad? Pero cuando lo has practicado toda tu vida y pasas por ciertas cosas… Cuando ganas, es algo fácil”.
“Pero si no ganas, por supuesto hay otros momentos difíciles en los que puedes frustrarte un poco. Y luego, por supuesto, tu confianza en ti mismo se ve afectada por la situación competitiva”, dijo Ricciardo.
“Así que te haces más preguntas”, añade el australiano. “Y creo que eso también pone en duda el amor por el deporte, es posible que ya no tengas tanta hambre y estarás listo para el otro lado del deporte, la preparación y todo eso”.