Los bancos pueden continuar cobrando dinero extra por retiros de efectivo. El Instituto de Quejas Financieras (Kifid) lo anunció este lunes, luego de las quejas de los consumidores. El hecho de que los clientes de ABN Amro hayan tenido que pagar extra desde julio del año pasado si retiran más de 12.000 euros anuales no se considera descabellado.
Entre otras cosas, Kifid recibió una queja de un consumidor que retira 300 euros a la semana, es decir, 15.600 anuales, como dinero vivo. En ABN Amro esto ahora cuesta 83 euros: 5 euros más medio por ciento de la cantidad retirada. La denunciante consideró que era injusto, que siempre retirara dinero para llevar un control de los gastos.
El comité de disputas del Kifid piensa lo contrario† Los costos de combatir los delitos financieros han aumentado, dicen los bancos. Y debido a que cada vez menos personas usan efectivo, el pago con tarjeta de débito se está volviendo más costoso. Según Kifid, estos son buenos argumentos siempre que los consumidores puedan pagar de otras formas.
En los últimos años, el uso de efectivo ha fuertemente declinado en los Paises Bajos. Mientras que en 2016 se retiraron 45.000 millones de euros de los cajeros automáticos, en 2020 fueron solo 28.500 millones. Por ejemplo, el efectivo es más accesible para las personas mayores y con bajo nivel de alfabetización que el pago digital. También por razones de privacidad, algunos prefieren efectivo.