“Queremos dar un paso hacia una mayor independencia energética”, dijo Fiala. Señaló que la invasión rusa de Ucrania ha demostrado que esto es importante. La Unión Europea todavía depende en un 40 por ciento del gas ruso.
La nueva central nuclear costaría al menos 6.000 millones de euros. La República Checa también dejó en claro que las empresas rusas y chinas no serían elegibles para la construcción. La francesa EDF, la surcoreana KHNP y la estadounidense Westinghouse han expresado su interés.
La licitación debe completarse en 2024, luego de lo cual la construcción debe comenzar en 2029. Para 2040, la República Checa tiene como objetivo generar más de la mitad de su producción de energía a través de reactores nucleares.