Más de un mes después de la masacre en una escuela primaria de Texas que dejó 21 muertos, el jefe policial responsable renunció, informaron varios medios. «Creo que esta es la mejor decisión para Uvalde», dijo el periódico local Uvalde Leader News citando al jefe de policía Pete Arredondo. Lo enviaron a casa con licencia paga hace más de una semana.
Un hombre armado de 18 años disparó y mató a 19 niños y dos maestros con un rifle en una escuela en Uvalde a finales de mayo. Desde el tiroteo fatal ha habido muchas críticas a los policías, especialmente a Arredondo, quien llegó minutos después de que el pistolero ingresara a la escuela. Pasaron unos 70 minutos antes de que los oficiales finalmente confrontaran al pistolero y lo mataran a tiros.
Arredondo ha dicho previamente a los medios estadounidenses que estaban esperando una llave del salón de clases donde se había escondido el pistolero y donde estaban presentes estudiantes y maestros. Los oficiales presentes tampoco habrían tenido suficientes armas y equipo para confrontar al tirador antes.
Esos argumentos han sido cuestionados en las últimas semanas, cuando imágenes de video difundidas mostraron que agentes con armas automáticas y escudos antibalas estaban en la escuela mucho antes de lo dicho. Las imágenes de seguridad también muestran que los oficiales presentes nunca verificaron si las aulas estaban cerradas. Si los oficiales presentes hubieran confrontado al pistolero antes, podrían haber salvado vidas, dicen los críticos.