Jeroen Soete, residente de Ostende, ocupa el segundo lugar en la lista de habitaciones de Vooruit y pronto podrá ocupar su asiento allí. “No puedo quedarme quieto muy bien. Así que, en definitiva, se lo diré a la presidenta, ella tiene que darme mucho trabajo. Porque esa es también la intención, que usted marque una diferencia para las personas, para el poder adquisitivo, para la atención sanitaria, y eso también lo haré en Bruselas”.