Cada vez salen más detalles de la causa contra el futbolista. En marzo, De Telegraaf informó que Promes, junto con familiares, había invertido dinero en un lote de cocaína. En concreto, se trataría de los más de cuatro mil kilos de drogas duras que fueron interceptados por la policía belga en Amberes en abril de 2020. Es por eso que el futbolista fue interceptado por la policía. Las escuchas telefónicas llevaron a la policía a la confesión de Promes de que en julio de 2020 apuñaló a su primo en la rodilla en una fiesta familiar en Abcoude.
Según Nieuwsuur, «la evidencia de las nuevas sospechas no proviene solo del teléfono móvil de Promes, sino también de mensajes encriptados que la policía ha interceptado».
Nieuwsuur escribe «que las fuentes alrededor de la investigación confirman que Promes está en la imagen debido a su participación en el tráfico de drogas a Australia».
Hasta ahora, Promes siempre ha negado el apuñalamiento, pero la transcripción de las conversaciones grabadas muestra que Promes quería matar a puñaladas a su primo.