El portero del Chelsea (que le pagó 80 millones) podría ser canjeado por Onana y acabar en el Inter: la pasión por los pájaros, la maxicláusula cobrada por el Athletic y ese desencuentro con Sarri…
Ni siquiera tenía 23 años cuando llegó a Londres como el portero mejor pagado de la historia. Ochenta millones de euros según la cláusula de rescisión, pagados al Athletic de Bilbao: una cantidad enorme. Sin embargo, en todos los vestuarios en los que ha estado, se ha ganado el apodo de “jilguero”.