¿Qué está pasando con Jennifer Hoffman? No hemos sabido nada de la actriz tras su enfrentamiento mediático con el biógrafo de los Meilandjes. “Ella ya no está en los Países Bajos”.
Fue una entretenida disputa mediática hace unos diez meses: la de Jennifer Hoffman y Jan Dijkgraaf, el biógrafo de los Meilandjes. Pensó que era muy hipócrita que ella quisiera unirse a Extinction Rebellion pero no quisiera dejar de volar. Estaba realmente enojada por esa acusación de hipocresía. “¡No me conoces en absoluto!”
¿Dónde está Jennifer?
Ha pasado casi un año después, pero nunca volvemos a saber de Jennifer. ¿Qué diablos está haciendo ella? Bueno, no mucho. Literal. “Actualmente estamos viviendo seis meses en los Pirineos, en la casa familiar de Dorian (su marido, ndr.)”, explica en LINDA.loves.
Jennifer camina por ahí muy descuidada. “Mi estilo actual es básicamente carente de estilo. Me puse lo que cayó al lado de mi cama. Jeans, ropa térmica, zapatos de Blundstone. Y mucha ropa de Dorian, porque trajo más”.
‘No hay nada aquí’
¿Qué hace ella todo el día en los Pirineos? “La vida aquí, a mil metros de altitud y solo en una montaña, es un desafío. No es precisamente un entorno idílico con acogedoras plazas de mercado, como me imaginaba viviendo en el extranjero. Aquí no hay nada y ya no soy nadie, pero en el tiempo de aburrimiento –y a veces en la frustración– reside el desarrollo”.
Y continúa: “También me doy cuenta del lujo en que nos encontramos al poder hacer esto. Y Cooper, nuestro hijo, está prosperando aquí. En Amsterdam sólo su cabeza está feliz, aquí todo su cuerpo está feliz, gracias a las vacas, las ovejas y los paseos que damos. Porque la naturaleza es mágica”.
Período
¿Cómo logra Jennifer que la vida sea emocionante entre las vacas y las ovejas? ¿Cómo se mantiene atractiva para su marido? ¿Tiene alguna propina? “Me gustaría destruir la ropa interior menstrual Snuggs. Cosas fantásticas y duraderas”.
¿Qué pasa si ella no menstrúa? “Mis lindos chicos obesos se han vuelto dulces y suaves, pero todavía me gusta ponerles lencería. Por fuera soy básica, pero por dentro puedo quedar bien con marcas como Aubade, Bamboo Basics y Agent Provocateur. Lo hago por mí mismo, porque Dorian no tiene nada que ver con eso. “¿Puede funcionar?”, luego grita”.
Jennifer vive en silencio: