Por Jana Förster y Konstantin Marrach
La popular columna BZ de la consejera sexual Jana Förster acaba de celebrar su segundo cumpleaños. Nos llegaron muchas felicitaciones de los lectores y, por supuesto, numerosas preguntas nuevas por correo electrónico y carta. Esta vez se trata del coito anal.
Un lector que desea permanecer en el anonimato escribe: “Recientemente (31) escuché de mis amigas en un fin de semana de chicas que practican sexo anal regularmente y lo disfrutan. Eso me hizo sentir mucha curiosidad, y ahora quiero ganar esta experiencia también. No les dije a mis amigos que era ignorante e inexperto, aunque habría tenido muchas preguntas. Así que ahora me gustaría preguntarte qué debo considerar si quiero aventurarme en este nuevo territorio con mi novio, a quien amo mucho”.
La consejera sexual Jana Förster responde: “Parece que ahora se habla, se escribe, se transmite por podcast, se discute y se debate sobre el sexo en todas partes. El sexo anal sigue siendo un tabú, aunque la tendencia muestra claramente que nunca se ha jugado tan abierta y activamente con la región anal de ambos sexos como ahora.
Investigadores de la Universidad de Indiana abordaron el tema y descubrieron qué caricias son particularmente excitantes para las mujeres en esta región del cuerpo. Se entrevistó a poco más de 3000 mujeres heterosexuales, bisexuales y lesbianas y se les pidió que informaran sobre sus experiencias al ser tocadas en el ano y alrededor de él.
Resultó que al 42,5 por ciento de las mujeres les gusta la estimulación en el ano. Al 35 por ciento de las mujeres les gusta la penetración ligera, es decir, la penetración anal, lo que significa que el ano se penetra hasta la profundidad máxima de la punta de un dedo. La estimulación simultánea del clítoris o sexo con penetración es especialmente excitante, lo que hace que la experiencia sea mucho más excitante.
En la encuesta, 355 participantes declararon que experimentaron orgasmos más intensos como resultado. Casi 500 mujeres informaron que ser tocadas en el área anal es una ‘sensación única que encuentro agradable’. En comparación: un poco más del 22 por ciento clasificó cualquier forma de estimulación anal como desagradable. Alrededor de una cuarta parte no había tenido ninguna experiencia en el momento de la encuesta.
Estimado lector, resulta que la región anal abre otra zona erógena para muchas mujeres, que generalmente solo aparece más tarde en la carrera sexual. Muchas vías nerviosas están entrelazadas en la puerta trasera y crean una sensación de lujuria completamente nueva a la que, francamente, debes acostumbrarte primero.
Por eso es importante un compañero de confianza si las primeras experiencias no se obtienen en soledad. Me gustaría darte algunos consejos (ver más abajo) para ayudarte a que nada “salga mal”.
Importante saber: contrariamente a la creencia popular, no tenemos solo uno, sino dos esfínteres. Si el sexo anal se describe como muy incómodo o incluso doloroso, lo más probable es que el esfínter externo no esté relajado. Podemos controlar conscientemente algunos de los músculos de los glúteos, pero algunos no.
Es por eso que un buen juego previo y un alto nivel de excitación sexual son esenciales para que las relaciones sexuales anales tengan éxito y se disfruten.
Consejera sexual Jana Förster
Por supuesto, la única forma de deshacerse de las sobras en esta región es hacer un colónico, que definitivamente es bueno para ambos lados de la cabeza cuando se trata de disfrutar y desconectar.
Finalmente, me gustaría darte el consejo de que puede ser útil primero hacerse amigo de la región anal y conocer las sensaciones durante el placer en solitario. Prueba lo que te gusta, también puedes probar un juguete suavemente, a esta región le gustan especialmente las vibraciones.
Con esto en mente, querido lector, le deseo mucha diversión probándolo.
4 consejos para el coito anal
1.) La parte pasiva marca la pauta, independientemente de si “qué tan rápido” o “qué tan profundo”: la parte receptora tiene la última palabra y es el jefe. Parar significa parar. Más lento significa que sucede más lentamente hasta que llega otro comando. ¡No es una oración completa!
2.) ¡Nada sin lubricante! La región anal no tiene glándulas para producir una secreción natural para la lubricidad. ¡El lubricante especial para el coito anal es imprescindible! Está especialmente adaptado a las necesidades de la región anal.
3.) Las duchas anales ofrecen seguridad para que no se puedan encontrar legados en el pene. Con práctica, todas las mujeres están seguras en pocos minutos. ¡Esto ayuda a disfrutar de la experiencia sin preocupaciones!
4.) Es obligatorio acortar las uñas y limarlas bien: la membrana mucosa es muy sensible, ¡especialmente en el ano!