“La verdad está con nosotros y en la verdad está la fuerza. La victoria nos pertenecerá”, sonaba. Llamó a los habitantes de las áreas anexas “bienvenidos a casa”.
“Rusia no solo abre las puertas de su hogar a estas personas, sino que también abre su corazón”, dijo Putin. Habló en un podio especialmente instalado en la pared del Kremlin. En la parte superior figuraban los nombres de los cuatro territorios anexados: Donetsk, Luhansk, Zaporizhia, Kherson, así como Rusia. A la izquierda estaba la inscripción “Elección del pueblo”, a la derecha “Juntos para siempre”.
El presidente ruso habló de un “día especial e histórico de la verdad, de la justicia”. Según él, los soldados rusos están actualmente “defendiendo heroicamente la elección de la gente” en Ucrania. También cantó el himno nacional ruso junto con los cuatro líderes designados de los territorios ocupados.
El anuncio de Putin llega en un momento en que sus tropas en el frente se encuentran en una situación desesperada. Varios miles de soldados rusos están rodeados por ucranianos en la ciudad de Lyman. “Todos los caminos de acceso han sido cortados. Los rusos no tienen más remedio que rendirse, a menos, por supuesto, que a los líderes del Kremlin no les importe el destino de sus soldados”, dijo el asesor ucraniano Mykhailo Podolyak.